Una encuesta sobre voto joven en General Pueyrredón. Pensar la relación entre jóvenes y política a 40 años de la recuperación democrática en la Argentina

Mariana Pozzoni

 

En el transcurso de las instancias electorales del 2023 se ha sostenido la importancia que el “voto joven” ha tenido a la hora de definir la fórmula ganadora. Los analistas se han ocupado de observar, especialmente, la aparente inclinación de los jóvenes hacia Javier Milei (véase, por ejemplo,  https://www.lanacion.com.ar/politica/el-voto-de-los-jovenes-una-clave-de-las-paso-que-se-proyecta-sobre-las-elecciones-presidenciales-nid21102023/; https://www.pagina12.com.ar/599492-que-pasa-con-el-voto-joven-y-fememnino-en-estas-elecciones-e), pero ¿Qué los movilizó a votarlo?

A continuación, se presentarán algunas reflexiones exploratorias que constituyen solo una puerta de entrada para el debate y buscan responder parcialmente a ese interrogante a partir de los resultados de una encuesta anónima distribuida mediante un formulario de google los días 14, 15 y 16 de noviembre a 186 jóvenes de entre 16 y 25 años. A su vez, antes del análisis de los datos recolectados, se propone un recorrido sobre las transformaciones de la relación entre “jóvenes y política” en los últimos cuarenta años que permite enmarcar históricamente la participación política juvenil en la coyuntura actual.

La relación jóvenes y política en clave generacional

Se parte del supuesto de que la categoría “juvenil” o “juventud” es entendida por las ciencias sociales como un concepto HISTÓRICAMENTE CONSTRUIDO, SITUACIONAL y CAMBIANTE. Es decir, las modalidades de “ser joven” han cambiado, y lo seguirán haciendo, a lo largo de la historia en función de las también cambiantes coyunturas sociales, políticas y económicas. Asimismo, son cambiantes las formas en las que las juventudes se involucraron en política a través del tiempo.

En este sentido, los aportes ya clásicos de Karl Mannheim (1928) sobre la CUESTIÓN GENERACIONAL, resultan estimulantes a la hora de pensar las transformaciones en la relación jóvenes y política a partir de la recuperación democrática en la Argentina. El sociólogo húngaro propone la existencia de una POSICIÓN GENERACIONAL que otorga ciertas potencialidades al ubicar a los individuos en un momento histórico específico que influye en su forma de ver el mundo, de pensar la realidad y que brinda una experiencia vivencial general compartida.

Si se tiene en cuenta la influencia del contexto político, económico y social, así como el recambio generacional (en parte biológico), se puede considerar que existen al menos cuatro posiciones generacionales diferentes entre el retorno democrático y la actualidad.  Cada una de ellas acompañada por una forma predominante –aunque no única- de incorporación de los jóvenes a la política.

1) La primera, podría ser identificarla en torno a la imagen del “Joven militante democrático”.

Esta etapa está caracterizada por una revalorización del ideal democrático que se inicia hacia fines de la última dictadura militar en el marco de la crisis de régimen y se consolida con fuerza durante la experiencia alfonsinista. En estos años, se produce una importante afiliación juvenil a los partidos políticos como forma de asumir la militancia.

En junio de 1984, por ejemplo, la revista Generación ’83 sostenía: “AHORA LOS NIÑOS NACERÁN CON UN ARMA BAJO EL BRAZO. Las nuevas generaciones nacerán en democracia, el arma más poderosa para defender sus verdades. Generación ’83 nace como revista, con el único compromiso de defender esa democracia” (Nº 4, junio de 1984, contratapa interna).

2) Una segunda se podría pensar bajo la figura de la “Reinvención militante” por fuera de las estructuras tradicionales de participación política

Este momento está atravesado por la emergencia de nuevas modalidades de organización colectiva y participación política juvenil por fuera de las vías institucionales: los jóvenes piqueteros y los movimientos de base territorial; la organización HIJOS; el colectivo 501 y organismos de DDHH vinculados a la denuncia contra las víctimas del gatillo fácil y la represión policial e institucional (Coordinadora contra la Represión Policial e Institucional-CORREPI); las manifestaciones en defensa de la educación en el marco de la reforma educativa de los noventa que afectó a todos los niveles de enseñanza y su financiamiento, son algunos de los ejemplos que podemos citar (Vommaro y Vázquez, 2008).

3) La tercera etapa está atravesada por la “Revalorización de la participación político-institucional”.

Momento de renovada participación juvenil en movilizaciones y organizaciones político- partidarias que nutren sus ramas juveniles dentro y fuera del espacio kirchnerista (La Cámpora; jóvenes PRO). Se produce una nueva reivindicación de la política como herramienta de cambio y móvil privilegiado de acción para producir mejoras en la calidad de vida. En este sentido, la reconstrucción posterior al estallido del 2001, en un contexto de recuperación económica, contribuye a generar una confianza en el accionar del Estado como motor de un conjunto de políticas que satisfacen las expectativas de lxs jóvenes.

4) Una cuarta etapa, más difícil de caracterizar en forma precisa, que expresa una nueva crisis de representación sintetizada en el rechazo hacia “la casta” pero que, lejos de encontrar la salida en alternativas colectivas y en la lucha por la defensa de los derechos conquistados en estos 40 años de democracia ininterrumpida, se refleja en una mirada individualista y antisistema.

Para comprender la difusión de esta perspectiva individualista, debemos considerar las nuevas formas de sociabilidad que han impulsado las redes sociales y que han contribuido a cierta despersonalización al momento de emitir opiniones. La posibilidad de expresarse sin tapujos ha dado lugar al fenómeno de los “haters” que atraviesa también la clave en la que los jóvenes interpretan el escenario político. Esto, sumado a los efectos que la pandemia de COVID-19 trajo aparejados en los jóvenes en distintos órdenes: 1) la exacerbación del uso de las nuevas tecnologías como medio de comunicación privilegiado (se cree que no es casual la emergencia de la figura de Milei en ese contexto); 2) el impacto socioeconómico que profundizó la sensación de falta de oportunidades y de un horizonte posible en los marcos del Estado; 3) la situación de encierro que contrastó con hechos como el festejo de cumpleaños de la primera dama en Olivos e impactó en el nivel subjetivo, acrecentando el rechazo hacia el oficialismo.

Encuesta sobre el voto joven en General Pueyrredon

La muestra presenta ciertas limitaciones producto del recorte: está fundamentalmente circunscripta a la ciudad de Mar del Plata, aparecen sobrerrepresentados el género femenino –esto puede indicar una mayor predisposición a responder la encuesta o vincularse con algunos espacios en los circuló, como los institutos de formación docente a los que concurren mujeres principalmente-, y los jóvenes que asistieron/asisten a escuelas privadas, a la vez que muestra una predominancia de votantes de entre 16 y 18 años. No obstante, se considera que resulta significativa para dar sustento empírico a algunas impresiones

Datos recogidos:

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Algunas impresiones cuantitativas:

De 80 encuestados que votan a Milei:

  • Hay un predominio de votantes hombres que se traduce en un 55 % de ese total. Puede parecer un porcentaje equilibrado entre géneros femenino y masculino, pero si consideramos la totalidad de la muestra, los datos arrojan una clara inclinación de voto masculino a Milei: 35 mujeres sobre un total de 119 representan un 29,41%; 44 varones sobre un total de 63 representan un 69,84 %; 1 sobre 5 “otro” representa un 20 % del total.
  • Hay un claro predominio de encuestados que asisten/o asistieron a escuelas privadas votantes de Milei: 60 encuestados que representan un 75% del total de votantes a Milei.

Algunas impresiones cuali-cuantitativas del análisis de las respuestas a la pregunta “Te pido que indiques 3 razones por las que vas a votar a Javier Milei”:

La nube de palabras se creó con la herramienta Voyant Tools

  • Una primera impresión es que a la hora de justificar el voto a Milei, los jóvenes subrayan el rechazo al candidato oficialista y expresan una inclinación identitaria antiperonista y/o antikirchnerista en su elección[1].

En este sentido, la segunda palabra más utilizada en las respuestas es “Massa” con 44 repeticiones (detrás de “no” con 65), mientras que “Milei” aparece solo 20 veces. En un mismo sentido “corrupto” (5), “peronismo” (4), “peronista” (4), “peronistas” (4), “kirchnerismo” (4), “k” (4), “mentiroso” (4), “kirchnerista” (3) “corruptos” (3), “corrupción” (3), “ñoquis” (3).

  • En segundo lugar, y vinculada con la anterior, aparece la idea de búsqueda de un “cambio (26), de un gobierno “diferente” (7) y “nuevo” (6) que pueda “mejorar” (6)/ conducir a un país “mejor” (6) en el “futuro” (4).

En relación con ello, muchos de los encuestados expresan una valoración positiva de las “propuestas” (19), vale mencionar que un 75% de encuestados votantes de Milei expresó conocer su plataforma política (algo difícil de contrastar con las preguntas comprendidas en la misma).  La mayoría de las respuestas vinculadas con este punto refieren –aunque no exclusivamente- a preocupaciones económicas que se expresan con el uso de los siguientes términos: “economía” (17), “inflación” (11), “dolarización” (6), “económicamente” (3), “económica” (3), “pobreza” (3), “plata” (3), “pesos” (3).  Otras áreas en las que expresan preocupación son: “educación” (8), “libertad” (6), “escuelas” (5), “vouchers” (4), “seguridad” (4), “inseguridad” (4).

A modo de cierre

El análisis de los datos recolectados en la encuesta permite sostener que en el balotaje los jóvenes no se diferenciaron respecto de otros segmentos etarios a la hora de inclinarse por el voto a Milei, lo que entra en tensión con la idea que sostiene que el voto joven aseguró el triunfo de este candidato. En este sentido, los números del Municipio de General Pueyrredon arrojan lo siguiente: La Libertad Avanza (Milei- Villarruel) obtuvo el 56,72 % de los votos (223.162) y UxP (Massa- Rossi) 43,27 % (170.260). Se podría conjeturar que los indecisos cambiaron su opción al final, igual que lo reflejado en las en encuestas generales. A su vez, las respuestas confirman una preferencia masculina hacia el presidente electo.

Bibliografía:

Pablo Vommaro y Melina Vázquez (2008), “La participación juvenil en los movimientos sociales autónomos de la Argentina. El caso de los Movimientos de Trabajadores Desocupados (MTDs)”, en Revista Latinoamericana de Ciencias Sociales, Niñez y Juventud, Manizales, Doctorado en Ciencias Sociales, Niñez y Juventud del Centro de Estudios Avanzados en Niñez y Juventud de la Universidad de Manizales y el Cinde, vol. 6, núm. 2, pp. 485-522.

Mannheim, Karl (1993 [1928]) “El problema de las generaciones”, en Revista Española de Investigaciones Sociológicas, Nº 62, Madrid, pp. 193- 242.

[1] Vale aclarar que esta inclinación antiperonista puede estar vinculada a la instancia de balotaje en la que muchos jóvenes –y votantes en general- expresaron una opción de “descarte” motivada por el rechazo al candidato opositor.

Algunas hipótesis sobre la transferencia de votos en General Pueyrredon: entre las PASO y el BALLOTAGE 2023

 Silvana Ferreyra 

En este breve artículo, nos interesa utilizar la técnica de inferencia ecológica para explorar algunas hipótesis sobre los movimientos del electorado marplatense en las tres instancias electorales (PASO, GENERALES, BALLOTAGE). Las visualizaciones, en este caso los diagramas de Sankey, nos permitirán arriesgar algunas hipótesis.

Las técnicas de inferencia ecológica nos permiten obtener estimaciones de la conducta individual (en este caso el voto) a partir de información agregada (en este caso las mesas de votación). Si consideramos el carácter secreto del voto, las mesas de votación son el mayor nivel de desagregación al que podemos acceder para datos oficiales. Para realizar el análisis utilizaremos un modelo estadístico desarrollado por el cientista político Gary King (Universidad de Harvard), quien elaboró una propuesta que logró superar las limitaciones de las estimaciones anteriores y obtener un amplio consenso científico.

Los ejercicios de transferencia de votos a nivel nacional en esta elección han confirmado lo que ya sospechábamos: Milei ganó el ballotage al sumar una parte mayoritaria de los votantes que se habían inclinado por Bullrich en las elecciones generales.  Las miradas que compararon PASO con ballotage, encontraron nuevamente que el voto a Bullrich se transfirió de manera completa y el de Larreta, aunque derivó algunos votantes a Massa y otros al voto en blanco, se decidió masivamente por Milei. (Véase https://www.pagina12.com.ar/elecciones-argentina-2023 )

Los analistas repiten una y otra vez “las matemáticas no fallaron”. Pero ¿qué pasa cuando miramos las transferencias entre elecciones municipales (PASO y GENERALES) y el ballotage? Por un lado, estos análisis nos permiten atender a los cruces entre dos elecciones (GENERALES Y BALLOTAGE) que resultan decisivas para la elección de cargos municipales y nacionales, respectivamente. A la vez, la elección municipal tiene la peculiaridad de incluir la opción legislativa y ejecutiva en la misma boleta, lo que podría evitar la polarización entre las opciones más competitivas que es habitual en los comicios para gobernador o presidente.

Diagrama 1. Transferencia de votos entre elecciones municipales PASO en MGP y BALLOTAGE presidencial en MGP 2023

Para visualizarlo en otra ventana https://observatoriopolitico.com.ar/wp-content/uploads/2023/12/grafico1_paso_bal.html

Diagrama 2.Transferencia de votos entre elecciones municipales PASO en MGP, elecciones municipales  y BALLOTAGE presidencial en MGP 2023

Para visualizarlo en otra ventana https://observatoriopolitico.com.ar/wp-content/uploads/2023/12/grafico2_paso_gen_bal.html

Notas: Los diagramas de Sankey muestran el caudal de votos de cada candidato/a para diferentes elecciones y el grosor de los flujos intenta cuantificar el peso electoral de esa transferencia. La base de datos de resultados fue extraída de SocialStats (https://socialstats.la/archivos/argentina/elecciones/) y el modelo de Gary King fue aplicado gracias a una adaptación del código elaborado por Ernesto Calvo para R (https://www.dropbox.com/s/05wlfh88mxtl5jo/Codigo%20y%20Data%20Transferencias%20PASO-General%20para%20R-2019.zip?dl=0). Se excluyeron mesas de extranjeros para comparar las mismas 1643 mesas en las tres elecciones. Los ausentes se consideran en todos los casos, aunque no siempre se incluyen en las visualizaciones.

 

  • El triunfo de Montenegro (JXC) como intendente de General Pueyrredón se habría obtenido más por la afluencia de nuevos votantes a los comicios generales que por transferencia de votos desde el candidato de La Libertad Avanza, Rodolfo Demaio.

 

  • Los votantes de Montenegro en la elección general se inclinaron mayoritariamente por Milei en el ballotage, aunque un porcentaje también importante optó por no asistir al comicio.

 

  • Los votantes de Mauregui (FIT) en las elecciones generales se habrían inclinado por Massa (UXP) y el voto en blanco en iguales proporciones durante el ballotage.

 

  • El gráfico 1 muestra que alrededor de un 20 por ciento de los votantes de Demaio en las PASO habría votado a Massa en el ballotage. Las transferencias que vemos en el gráfico 2 hacen difícil seguir el recorrido de esos votantes, salvo si también consideramos  aquellos que eligieron a Raverta (Encuentro Marplatense) o se canalizaron a través del voto en blanco en las generales. Para confirmar este supuesto sería necesario contrastar con estimaciones obtenidas mediante encuestas y otras mediciones de opinión. Sin embargo, si consideramos que algunos de los integrantes de las listas a concejales de La Libertad Avanza habían formado parte del Frente Renovador (que llevo a Massa como candidato a presidente en 2015), la afirmación puede volverse más consistente.(véase https://observatoriopolitico.com.ar/los-mismos-de-siempre-una-mirada-a-los-precandidatxs-a-concejal-y-consejero-escolar-en-general-pueyrredon-2015-2023/) Asimismo, si nos basamos en un ejercicio anterior, una parte del voto vinculado a Pulti en 2019, que se habría orientado hacia LLA en las PASO 2023 (https://observatoriopolitico.com.ar/un-ejercicio-sobre-transferencia-de-votos-en-general-pueyrredon-entre-2019-y-2023/), podría haber optado por Massa en el ballotage. En todo caso, parece bastante plausible que los votos que permitían crecer el volumen electoral de la candidatura de Massa, estaban entre los votantes originales de Milei antes que en el electorado que quedo “huérfano” de candidatura tras las generales.

 

En definitiva, el caso analizado muestra que las transferencias de voto entre elecciones locales y nacionales, aunque en ocasiones pueden resultar transparentes o “matemáticas” e incluso pueden parecer orientadas por las dirigencias, en otras oportunidades (probablemente la mayoría) resultan mucho más complejas y difíciles de anticipar.[1] Identidades políticas, lógicas oficialismo/ oposición; pero también lealtades vecinales y acuerdos locales explican las coaliciones y las activaciones territoriales en las distintas instancias electorales.

[1] Para seguir profundizando el análisis recomendamos la lectura de Marcela Ferrari “¿Massa y Kicillof sí, Raverta no? Acerca del voto a Unión por la Patria y Encuentro Marplatense en el Partido de General Pueyrredón” Disponible en https://observatoriopolitico.com.ar/massa-y-kicillof-si-raverta-no-acerca-del-voto-a-union-por-la-patria-y-encuentro-marplatense-en-el-partido-de-general-pueyrredon/

 

¿Massa y Kicillof sí, Raverta no? Acerca del voto a Unión por la Patria y Encuentro Marplatense en el Partido de General Pueyrredón

Marcela Ferrari (INHUS, CONICET)

La derrota de Fernanda Raverta, candidata a intendenta por Encuentro Marplatense (EM) para el partido de General Pueyrredon (PGP), frente al actual edil Guillermo Montenegro, candidato de Juntos por el Cambio (JxC), en las elecciones del 22 de octubre, merece detenernos en algunas reflexiones. Tanto más cuando esta situación se reitera, en una instancia en la cual Raverta se presentó encabezando una coalición local (EM) formada por Unión por la Patria (UxP) y la agrupación vecinal liderada por Gustavo Pulti, Acción Marplatense, que en 2019 resultó tercera en las elecciones municipales.

En las generales de octubre, Raverta obtuvo 35,96% de los votos, un porcentaje cercano al alcanzado en el municipio por el candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof (36,18%), y mayor en un punto al obtenido por Sergio Massa para presidente de la Nación (34,83%). Los dos últimos triunfaron en las elecciones en esta jurisdicción poco afín al peronismo. A su vez, Montenegro, con más del 41% de los votos, superó ampliamente el 33,76% alcanzado por el candidato a gobernador de su propia fuerza política, JxC, Néstor Grindetti, y el 29,71% que logró Patricia Bullrich, la candidata presidencial.

Ante ello, la pregunta que moviliza este texto es qué subyace a ese comportamiento electoral. En una primera lectura, se desprende una conclusión: el voto a Montenegro, afianzado en Mar del Plata, pone de manifiesto que los municipios son territorios de construcción de la política cuyo comportamiento electoral es relativamente autónomo de lo que ocurre en las arenas provincial y nacional. Los mapas electorales que siguen muestran que la incongruencia de voto entre niveles registrada en General Pueyrredon se reitera en numerosos partidos bonaerenses:

Mapas 1 y 2

Triunfos electorales para intendentes (1) y presidente (2) en la Provincia de Buenos Aires

Elecciones generales, 22/10/2023

 Fuente: https://www.pagina12.com.ar/601412-resultados-elecciones-2023-mapas-interactivos-con-los-datos-

Referencias: Celeste: UxP; Amarillo: JxC; Gris y Violeta: LLA

Habrá que preguntarse, entonces, qué ocurre por debajo de ese registro extendido en el territorio provincial, retornando al escenario local. Porque si la incongruencia señalada puede aparecer como una paradoja del electorado, otras cuestiones deben permitir explicar cierta estabilidad en el voto local del PGP. Si comparamos el voto a intendente 2023 con el de las elecciones de 2019, teniendo los mismos principales adversarios enfrentados, mientras el candidato de JxC incrementó el porcentaje de sufragios en un 0,70%, Raverta, que en 2023 sumó a Unión por la Patria la agrupación vecinal de Gustavo Pulti, disminuyó en un 1,59% el porcentaje de votos.[1]

Se hace necesario, entonces, recuperar algunas dimensiones y ciertas prácticas imbricadas en redes político sociales formales e informales que puedan explicar la aparente paradoja del caso marplatense, tanto como la continuidad en el triunfo del actual intendente.

Dimensiones:

¿Cuánto de la dimensión emocional, entendida como aquella sensibilidad que despiertan en el electorado las representaciones, las acciones, los discursos y las trayectorias personales de los candidatos, pudo afectar la elección a intendente?

El actual y electo intendente, abogado, a sus 60 años se presentaba a la teleaudiencia como “el gordo Montenegro”, procurando proximidad. Hasta 2007 había desarrollado una trayectoria en el campo judicial, como fiscal de Estado y, posteriormente, juez federal. Dio “el salto a la política” cuando Mauricio Macri le ofreció incorporarse a Propuesta Republicana (PRO) y a su gobierno como ministro de Justicia y Seguridad del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires; su principal legado fue la creación de la Policía Metropolitana. Con posterioridad, fue designado embajador argentino en el Uruguay, fue diputado nacional y en 2019 volvió a Mar del Plata, para liderar la coalición desde la cual resultó intendente de la ciudad, con el apoyo del entonces presidente y la gobernadora María Eugenia Vidal para desplazar a las fuerzas de Agrupación Atlántica conducidas por Carlos Arroyo en el gobierno de la ciudad, concentrando sus principales apoyos en los sectores medios de los circuitos electorales centrales de Mar del Plata, en alianza con la Unión Cívica Radical. Su gestión fue consecuente con esas adhesiones, tal como se reflejó en especial durante el período de pandemia (ver los informes I a IV de la solapa “COVID” de este Observatorio), en las obras públicas realizadas, en los eventos colectivos que atrajo a la ciudad y en la oposición a la cesión de tierras del Marquesado.

La candidata representada por los medios hegemónicos como “la camporista Fernanda Raverta”, tiene 46 años, es licenciada en Trabajo Social, y reúne una trayectoria política extensa. Se inserta en la coalición político partidaria oficialista de signo nacional y popular liderada por el peronismo y, dentro de él, se ubica en la misma línea que el gobernador de la provincia. Actualmente, es titular de la Administración Nacional de la Seguridad Social (ANSES), agencia a través de la cual se canaliza buena parte de la acción social del Estado. Ha sido diputada nacional y provincial y ministra de Desarrollo de la Comunidad de la provincia de Buenos Aires. Ha sido fundadora de H.I.J.O.S. regional Mar del Plata. Se vincula a distintos niveles de poder oficial -provincial y nacional-, y mantiene fuertes lazos territoriales locales implantados en organizaciones políticas, movimientos sociales y organismos de derechos humanos. El discurso preciso y consistente transmitido a través de una campaña que procuró alcanzar a una audiencia amplia, que animaba a la acción y al compromiso de los vecinos, los constantes recorridos por los barrios de la ciudad y el horizonte de movilización de recursos que favorecerían al municipio en caso de triunfar, fueron insuficientes para ganar en las elecciones locales.

Por cierto, los perfiles de los candidatos no definen la adhesión de determinados votantes. Las dos coaliciones enfrentadas son policlasistas y reciben adhesiones de una pluralidad de adherentes, desde el punto de vista de su procedencia social, económica y cultural.  Sin embargo, el recorrido de los barrios, la inclusión de los movimientos sociales en el armado político y la acción social desplegada a favor de los sectores vulnerables en el caso de Raverta, parece haber producido efectos en la dimensión socio territorial de distribución del sufragio: la candidata triunfó en la extensa periferia del PGP donde, grosso modo, habita la población más vulnerable, urbana, rururbana y rural, menos concentrada.

Mapa I

Distribución del voto electoral por coalición

PGP, elecciones generales a intendente – 2023

Fuente: Tomado de https://www.0223.com.ar/nota/2023-10-23-19-38-0-general-pueyrredon-partido-en-dos-montenegro-se-afianza-en-el-centro-y-raverta-domina-en-la-periferia

Referencias: celeste, voto a EM; amarillo, voto a JxC; gris, voto a LLA

El mapa muestra la distribución espacial del voto que favoreció a los candidatos a intendente: en los nueve circuitos centrales, urbanos y demográficamente densos, triunfó JxC; en diecinueve de la periferia, EM; en uno empataron ambos y en cinco ganó La Libertad Avanza (LLA).

En cuanto a la estricta dimensión política, podríamos considerar distintos factores que hacen a a la práctica de las organizaciones partidarias y coalicionales. Como se señaló para el resto del país, también en el PGP, la competencia en las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) se planteó por tercios. La consigna con que EM, como el resto de Unión por la Patria en el país, militó el voto local, provincial y nacional durante el lapso que medió entre el 13 de agosto y el 22 de octubre fue “La damos vuelta”. Es decir, el objetivo era superar la tendencia que en las PASO se había mostrado adversa al peronismo. Como anticipamos, esto se cumplió en el orden provincial y nacional mas no en el municipal, tal como lo muestra la Tabla 1, que nos permite avanzar en una descripción de los resultados electorales porcentuales, para tratar luego de avanzar en una mayor comprensión.

Tabla 1

Comparación de voto a intendente, gobernador y presidente

PASO – Elecciones generales – PGP, 2023

(en %)

Fuente: https://paso.resultados.gob.ar/elecciones/1/252/1/-1/-1/Buenos-Aires/Secci%C3%B3n-Quinta/General-Pueyrred%C3%B3n  y https://resultados.gob.ar/elecciones/1/252/1/-1/-1/Buenos-Aires/Secci%C3%B3n-Quinta/General-Pueyrred%C3%B3n

Como se puede observar en la Tabla 1, entre ambas elecciones hubo un crecimiento general de la participación electoral, una disminución del voto en blanco y un aumento del porcentaje de votos afirmativos.

Los incrementos porcentuales siempre fueron mayores en las coaliciones lideradas por el peronismo, pero no se distribuyeron de la misma manera para los diferentes candidatos: para intendente el voto de Encuentro Marplatense se incrementó en un 4,74%, para gobernador un 6,73% y para presidente un 8,43%. De ello se desprende que la coalición peronista fue eficaz para cooptar en todos los niveles. Pero en la arena local, aquella en la cual en las PASO había obtenido una mejor performance, atrapó menor cantidad de sufragios nuevos.

Entre ambas instancias electorales, JxC perdió porcentual de voto a gobernador (-4,78%) y a presidente (-4,24%); en cambio en las elecciones a intendente aumentó en un 1,34%. Por su parte, LLA, en octubre superó levemente el porcentaje de voto a gobernador alcanzado en agosto (0,36%), algo más el voto a presidente (1,23%), pero lo disminuyó en el caso de intendente (-2,33%).

A la luz de la descripción realizada es grande la tentación de decir que el porcentaje de votos que perdió LLA en MGP se trasladó al candidato de JxC, es decir, Guillermo Montenegro. Esta afirmación podría sostenerse en información difundida con anterioridad a las elecciones generales acerca del acercamiento del intendente Montenegro a la fuerza de ultraderecha, que en el plano local alentaba a sus simpatizantes a votarlo[2]. La tendencia a votar ganador, sumada a los argumentos acerca de la falta de representatividad para LLA de algunos candidatos a concejales que con anterioridad habían pertenecido al kirchnerismo o el massismo y en esta nueva instancia acompañaban a De Maio, podrían haber influido en parte del electorado libertario marplatense a sumar su voto al actual intendente. Fusión de las derechas y corte de boleta justificarían el incremento de voto a Montenegro. Hasta se podría pensar en la adhesión de electores conservadores o de derecha que migran su voto a Montenegro por el temor a un gobierno peronista local.

Sin embargo, resulta conveniente comparar los votos absolutos obtenidos en ambas instancias electorales por las principales fuerzas en competencia del PGP.

Tabla 2

Voto a intendente del Partido de General Pueyrredón

PASO y elecciones generales (2023).

Fuentes: https://paso.resultados.gob.ar/elecciones/10/74/1/-1/-1/Buenos-Aires/Secci%C3%B3n-Quinta/General-Pueyrred%C3%B3n#agrupaciones y  https://resultados.gob.ar/elecciones/10/77/1/-1/-1/Buenos-Aires/Secci%C3%B3n-Quinta/General-Pueyrred%C3%B3n#agrupaciones.

A la luz de la cantidad de votos obtenidos por las principales fuerzas en competencia, la lectura adquiere un nuevo matiz. En una elección en la cual la participación creció en un 8,15% y el voto en blanco disminuyó en un 0,94%, todas las fuerzas políticas incrementaron el caudal de sufragios para intendente. La que más votos cooptó fue EM, que en ese aspecto aventajó en más de 7000 sufragios a su principal adversario. Pero ni siquiera alcanzando el máximo de votos que Unión por la Patria obtuvo en el PGP para presidente (140.990) o para gobernador (139.003), Raverta hubiera logrado la intendencia.

*    *    *

Una vez más, la explicación del sufragio se torna difícil de captar, por variada y compleja. En este artículo se trató de acercar algunas lecturas más descriptivas que analíticas, a través de una exploración inicial desde las dimensiones emocional, socio-territorial y política, por considerar que era necesario aclarar estos elementos para avanzar hacia la indagación más profunda de un problema que, sin dudas, necesita ser trabajado en profundidad: por qué se elige una candidatura sobre otra.

 

[1] En las elecciones de 2019, el Frente de Todos obtuvo el 37,63% de los votos y Acción Marplatense el 11,03; Juntos por el Cambio, 40,43%. Cf. A. Bianchino, “¿Mar del Plata antiperonista? Pensar las elecciones de 2019: entre el corte de boleta y el vecinalismo”.

[2] https://laletrachica.com.ar/nota/18200/montenegro-le-suelta-la-mano-a-bullrich-y-juega-con-el-corte-de-boleta/. https://www.pagina12.com.ar/599278-las-seiscientas-mil-razones-que-unen-a-guillermo-montenegro-

¿Mar del Plata antiperonista? Pensar las elecciones 2019: entre el corte de boleta y el vecinalismo.

 

Un ejercicio sobre transferencia de votos en General Pueyrredon entre 2019 y 2023

 Silvana Ferreyra[1]

Los diagramas interactivos muestran las transferencias de votos entre las elecciones PASO de 2019 y las PASO de 2023 en General Pueyrredon.

El primer diagrama plasma el análisis para la categoría intendente. En 2019 tomamos las candidaturas de Baragiola y Montenegro (Juntos por el Cambio – JXC), Bonifatti (Consenso Federal, CF),  Raverta (Frente de Todos), Arroyo (Agrupación Atlántica) y Pulti (Acción Marplatense). En 2023 observamos los votos de Montenegro (JxC),  Raverta (Encuentro Marplatense, EM), Demaio (La Libertad Avanza, LLA) y los votos en blanco.

Para visualizarlo en otra ventana https://www.observatoriopolitico.com.ar/wp-content/uploads/2023/08/intendente19_23-2.html

Por supuesto, cada coalición conserva buena parte de sus votantes. La coincidencia puede ser incluso más importante porque las dos principales fuerzas políticas repiten candidato/a a intendente: Montenegro (Juntos por el Cambio) y Fernanda Raverta (Frente de Todos 2019 y Encuentro Marplatense 2023). En esa línea, al electorado poco volátil de Montenegro, se le suma el aporte de Consenso Federal, quien en 2019 había llevado a Bonifatti como candidato a intendente y hoy forma parte de la coalición de gobierno.

Pero ¿de dónde vienen los votos de la Libertad Avanza, una fuerza política que estaba ausente en el comicio anterior? Según esta estimación, los votantes de Acción Marplatense y Frente de Todos en 2019 habrían constituido el mayor caudal de votos de La Libertad Avanza. Por otro lado, los votantes de Acción Marplatense parecen haber votado en mayor proporción a Demaio (LLA) que a Raverta (EM). En espejo, los votantes del ex intendente Arroyo, que han quedado desperdigados en esta elección, parecen haberse inclinado mayoritariamente por la candidatura de Raverta.

El segundo diagrama muestra el análisis de la transferencia de votos entre las candidaturas a presidente en 2019 y 2023.

Para visualizarlo en otra ventana https://www.observatoriopolitico.com.ar/wp-content/uploads/2023/08/presidente19_23-1.html

En primer lugar, los votantes de Macri en 2019 se inclinaron en mayor medida por Bullrich y en menor medida por Larreta, algo que está a la vista frente a los resultados electorales.

Más allá de lo esperable, un dato llama la atención. Una parte importante de los votos de Alberto Fernández habrían migrado hacia la candidatura de Milei en 2023. El resto de los votos se distribuyen entre los que eligieron a Massa, a Grabois y quienes no asistieron a la elección.

La transversalidad de la distribución de los votos a Lavagna le hace perder relevancia para nuestro análisis.

Sobre la metodología

La inferencia ecológica intenta estimar la conducta individual a partir de datos agregados. Es importante destacar que se trata de un ejercicio con potencialidades y límites. Para estimar estos flujos de votantes aplicamos a los resultados desagregados en los circuitos de General Pueyrredon un modelo llamado de Inferencia Ecológica desarrollado por el cientista político estadounidense Gary King (Harvard). Hemos ajustado para este estudio un código compartido por Ernesto Calvo para realizar estas estimaciones con lenguaje de programación R.[2]

Algunos autores han avalado el análisis de las transferencias de votos entre dos elecciones consecutivas con esta metodología, al considerar que produce buenos resultados en regiones homogéneas. Hemos aplicado el modelo a unidades espaciales relativamente estables como los circuitos, sumando para 2023 los resultados de aquellos que no habían sido subdivididos en 2019. No obstante, el modelo ganaría en precisión al estudiar los resultados mesa por mesa, actividad en la que avanzaremos cuando los mismos se encuentren disponibles para 2023.

Las estimaciones para las categorías minoritarias (<2%) pueden contener márgenes de error considerables, por lo que las hemos eliminado de las visualizaciones.

 

[1] Un agradecimiento especial a Emmanuel Pironi y Sol de la Torre, que realizaron la carga de datos para 2023 y colaboraron con la revisión.

[2]Véase https://www.dropbox.com/s/05wlfh88mxtl5jo/Codigo%20y%20Data%20Transferencias%20PASO-General%20para%20R-2019.zip?dl=0. Para la realización de los diagramas de flujo hemos utilizado https://gist.github.com/jsajuria/ab437c77bc4823de99b5a08a84f11f22

¿Los mismos de siempre? Una mirada a los precandidatos/as a concejal y consejero escolar en General Pueyrredón (2015-2023)

Silvana Ferreyra

El 24 de junio de 2023 las distintas fuerzas y coaliciones políticas presentaron precandidatxs para concejales y consejeros/as escolares en General Pueyrredón.

Desde su nacimiento en 2015 el OCPE se ha interesado por estudiar las alianzas que se tejen y destejen a la hora de explicar la construcción de un candidato local (Vease https://www.observatoriopolitico.com.ar/configuraciones-politicas-los-candidatos-locales-y-sus-apoyos/ y https://www.observatoriopolitico.com.ar/infografia-paso-2017/) .  Una de las formas de estudiar estas configuraciones políticas es la elaboración de una base de datos con los precandidatxs a concejales y consejeros escolares de todas las fuerzas políticas desde 2015. Si bien esta herramienta todavía se encuentra en construcción, presentamos un avance con los primeros resultados.

Por el momento hemos cargado 317 personas que ocuparon 370 precandidaturas.[1] El primer dato a resaltar es que solo 48 personas se presentaron como candidatos/as en más de una oportunidad entre 2015 y 2023  (un 15.14% del total de la muestra), lo que evidencia una importante movilidad dentro del personal político local. Entre estas 48, 45 lo hicieron en 2 oportunidades y 3 (todas mujeres) en 3.  Un tercio de estas, repitieron candidatura en espacios políticos distintos.

Si atendemos a la variable que hemos denominada identidad de origen, etiquetada manualmente a partir de una búsqueda online sobre las agrupaciones o sectores políticos con que se identifica inicialmente cada precandidato/a, podemos observar que sectores son aquellos que repiten candidatxs con más frecuencia.

A través de las posiciones de estos precandidatos/as, nos interesa observar confluencias entre las distintas agrupaciones para el armado de frentes en las distintas coyunturas electorales. Hemos elaborado un diagrama de Sankey para visualizar, a partir de este recorte del dataset que analiza a los precandidatxs que aparecen en más de una elección, los flujos entre las diversas identidades- agrupaciones políticas de origen y las coaliciones que han movilizado la política local.[2]

El diagrama de Sankey es un tipo específico de diagrama de flujo, en el que la anchura de las flechas se muestra proporcional a la cantidad de flujo. Este tipo de diagramas pone un énfasis visual en las transferencias importantes o flujos dentro de un sistema, y son de gran ayuda en la localización de las contribuciones dominantes para un flujo total.

En primer lugar, podemos ver que existen fuerzas políticas que alimentan a distintas coaliciones en diferentes elecciones. En ese sentido, el Partido Justicialista (PJ), la UCR y Acción Marplatense (AM) son las fuerzas que han nutrido una mayor cantidad de espacios políticos, incluso en algunos casos contrapuestos. En el primer caso, un sector vinculado a Lucas Fiorini y otro relacionado con Luis Barrionuevo, aparecen entre los más destacados; respecto de la UCR, las vinculaciones no se dan sólo con la línea oficial del partido, sino también sectores vinculados al GEN y al alfonsinismo.

Como contrapunto, podemos ver que algunas agrupaciones e identidades políticas aportan siempre al mismo espacio, tal como se observa en los flujos del PRO hacia Cambiemos y del sector que hemos denominado kirchnerismo (Campora, CTA, Nuevo Encuentro, etc.) hacia el Frente de Todxs. En la misma línea, el Frente de Izquierda (FIT), conformado por el Partido Obrero (PO) y el Partido de los Trabajadores Socialistas (PTS), es la alianza política más estable. Por un lado, porque se presenta como coalición en todas las elecciones analizadas. Por otro, porque 9 de las 48 personas que repiten candidatura pertenecen a este espacio político.  Cabe destacar que 7 de ellas pertenecen al Partido Obrero, la fuerza donde parece existir menor circulación.

Un elemento más para seguir reflexionando: los espacios que se presentan como renovadores o “anti-casta”, tanto Creciendo Juntos como La Libertad Avanza, llevan en los primeros lugares candidatxs que ya fueron precandidatxs a concejal por otros espacios políticos.

Notas

[1] Hemos recuperado de fuentes oficiales y portales de noticias las listas de precandidatos de aquellas fuerzas políticas que superaron las PASO entre 2015 y 2021. Para 2023 hemos recuperado las fuerzas políticas que podrían superar esta instancia, a partir de las expectativas que se generan por lo acontecido en los años anteriores. En líneas generales, cuando los datos estaban disponibles, hemos incorporados los primeros 8 candidatos a concejales titulares y los primos 3 a concejero/a  escolar

[2] Para obtener una visualización más clara hemos efectuado algunas clasificaciones propias. Se utiliza CAMBIEMOS para designar a Cambiemos en 2015 y 2017 y Juntos por el Cambio en 2019 y 2021.  ACCIÓN MARPLATENSE para identificar los diversos frentes encabezados por Gustavo Pulti, FRENTE MARPLATENSE en 2015, AM- VAMOS CON VOS en 2017. FRENTE de TODOS (FdT) para designar a FRENTE PARA LA VICTORIA en 2015, UNIDAD CIUDADANA en 2017, FRENTE de TODXS en 2019 y 2021.

Un nuevo calendario electoral en el 40 aniversario de democracia

Augusto Bianchino (INHUS – CONICET – UNMdP)

En 2023 la sociedad argentina celebra, una vez más, elecciones libres para elegir a sus representantes. Este año, además se cumplen cuarenta años desde la transición democrática. La mejor manera de rendir homenaje a este aniversario, es concurriendo a ejercer el derecho al voto en cada uno de los pueblos argentinos. Si bien la calidad democrática no se agota en la realización de elecciones, el desarrollo recurrente de comicios para elegir representantes constituye la piedra fundamental de todo sistema democrático.

Argentina, la región, y nuestro mundo en casi su totalidad, atravesó recientemente un fenómeno que puso a prueba a los Estados nacionales y a sus gobiernos democráticos. La pandemia del Covid-19 y el escenario pos pandémico posterior impactaron en los principales ámbitos de la vida humana. La legitimidad de los gobiernos quedó, tanto en su capacidad resolutiva como en su naturaleza misma, sujeta a diversas evaluaciones y juicios de todos los grupos y las redes que integran la vida social. En Argentina se suma además una crisis económica aguda, profundizada por los efectos globales de la guerra en Ucrania, que se expresa con mayor visibilidad en un proceso inflacionario acelerado.

El cúmulo de estas problemáticas, dieron calce, justificado en algunos casos, a la rehabilitación del debate sobre de las deudas sociales y económicas que no han logrado saldarse aun en democracia. Con todo, el proceso electoral de este año supone -además de una nueva concertación del acto comicial en el marco de la conmemoración de cuarenta años de recuperación democrática ininterrumpida- un desafío para la democracia argentina, cuando el avance de posiciones reaccionarias y antidemocráticas se refuerza ante la dificultad que encuentran los partidos políticos y sus aliados sociales y económicos para construir una salida a la crisis generalizada que se vive en nuestro país.

En este contexto, el desarrollo de un nuevo proceso electoral en el marco del mentado aniversario de nuestra aun joven democracia, puede contribuir en tanto paraguas simbólico y programático para dar alguna salida de la crisis y limitar las reacciones antidemocráticas. Siguiendo esa línea de reflexión, realizamos desde el OCPE esta primera publicación sobre las elecciones 2023 con una doble la intención, contribuir al debate del fortalecimiento de la democracia a partir de nuestros saberes académicos y profesionales, a la vez que aportar a la construcción de interpretaciones de los procesos electorales en nuestro país.

Este año las elecciones son de carácter ejecutivo y legislativas parciales. A nivel nacional, se vota para Presidente y Vicepresidente de la Nación, y para la renovación de 130 Diputados y 24 Senadores en el Honorable Congreso de la Nación. En el orden subnacional, de las 24 jurisdicciones (23 provincias y la Ciudad Autónoma de Buenos Aires), 22 renuevan sus ejecutivos. Las excepciones son Santiago del Estero y Corrientes que lo hicieron en 2022. Las provincias renuevan, además, bancas de sus congresos provinciales y cargos de intendentes y concejales en los municipios. En el caso puntual de la provincia de Buenos Aires, se renuevan 46 Diputados y 23 Senadores, mientras que a nivel municipal se renovarán las 135 intendencias y 1097 concejalías repartidas entre todos los municipios.

El escenario electoral argentino suele configurarse con una gran complejidad. En un mismo año electoral, sobre todo en aquellos de elecciones ejecutivas, se desarrollan una multiplicidad de elecciones que difieren en el nivel de competencia o gobierno (municipal, provincial y nacional), temporal y geográficamente (diferentes fechas entre provincias y entre provincias y nación.). A esto debe sumarse además el desarrollo de internas abiertas que muchas provincias también realizan al igual que a nivel nacional sucede con las Primarias Abiertas, Simultáneas y Obligatorias. La autonomía que poseen las provincias para formular sus propias reglas electorales, permite a los gobiernos provinciales establecer sus propios calendarios electorales para la elección de cargos municipales y provinciales. Durante el año en curso, una importante cantidad de elecciones provinciales estarán desdobladas de las nacionales. En la Tabla 1 se repasan los eventos más relevantes del calendario electoral argentino para 2023.

El nuevo calendario electoral argentino dio comienzo el 12 de febrero en La Pampa con el desarrollo de las Elecciones Internas 2023. La estructura del sistema electoral pampeano merece un análisis aparte, puesto que la implementación de las internas abiertas simultáneas y obligatorias suponen una relación entre la oferta electoral y el electorado que establece ciertas diferencias entre afiliados a partidos y elector general (no afiliado). A diferencia de las Primarias nacionales en las que toda la ciudadanía habilitada para votar, puede elegir, independientemente de su filiación partidaria, a cualquiera de los precandidatos que se presentan. La elección celebrada en La Pampa no sólo abrió el calendario electoral argentino, sino que ganó cierta relevancia al desarrollarse la primera interna en una de las dos coaliciones político electorales más importantes del país. La elección general en esta provincia será el 14 de mayo. Los pampeanos tendrán luego dos elecciones más para elegir los cargos nacionales, al igual que el resto del pueblo argentino.

Por su parte, el 13 de agosto, se celebrarán las Primarias nacionales, proceso de internas abiertas en las que se presentarán los pre-candidatos para presidente y vicepresidente y legisladores nacionales. Luego, el día 22 de octubre tendrá lugar la elección general, contienda en la que se batirán los ganadores de esas Primarias. Finalmente, y sólo en el caso de que no haya un ganador que supere el 45% de los sufragios u obtenga el 40% con una diferencia de 10 puntos de su competidor inmediato, concurriremos a las urnas también en noviembre para definir la presidencia por la vía del ballotage.

Fuentes

[1] El calendario electoral puede incluir también fechas de inicio y cierre de campañas, fechas de debates presidenciales pautados por ley, etc. Por una cuestión de espacio y para enfocarnos estrictamente en la celebración de comicios, solo se consignan las fechas referentes a elecciones nacionales y provinciales.