Características del reclamo por el aborto legal, seguro y gratuito en el Municipio de General Pueyrredón (2018)

Por Cintia Rodrigo (CONICET- CEHis, UNMdP)

El 6 de marzo de 2018 ingresó al Congreso de la Nación el Proyecto de Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo (IVE) presentado por la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito (de ahora en más Campaña Nacional). Ese día se realizaron actividades de apoyo a la presentación en distintos lugares del país y Mar del Plata fue uno de ellos. Convocada por el Movimiento de Mujeres y Diversidad de Mar del Plata-Batán (MMD), se realizó una concentración frente al Palacio Municipal donde alrededor de 50 personas se manifestaron con sus característicos pañuelos verdes en apoyo al proyecto de ley.

Desde 2005, año de lanzamiento de la Campaña Nacional, los pañuelos verdes fueron pasando de ser patrimonio de un grupo reducido de militantes a ser un distintivo cada vez más frecuente en las actividades del feminismo en Argentina. Año a año se fueron sumando mujeres, travestis, trans y varones a esta Campaña Nacional, de manera permanente algunas, otras portando sus pañuelos en cada una de las actividades del movimiento de mujeres de las que participaba.

En 2018 cambió esa realidad y la presencia de los pañuelos verdes se multiplicó por miles. Días antes de la presentación del proyecto de ley—por séptima vez consecutiva—el presidente Mauricio Macri anunciaba que habilitaría el debate en el Congreso. Y dos días después de la presentación, el histórico paro internacional de mujeres del 8 de marzo evidenció el gran crecimiento y consolidación del feminismo en Argentina, y fue un impulso muy importante para la instalar en agenda el debate sobre la legalización del aborto. A cinco meses del inicio del tratamiento parlamentario el proyecto cuenta con media sanción de la Cámara de Diputados. Resta una instancia clave: el Senado definirá este 8 de agosto si se convierte en Ley.

Los cinco meses transcurridos desde la presentación del proyecto de ley se caracterizaron por una intensa actividad del feminismo nacional y local. Esta nota tiene como objetivo describir los rasgos que asumió el reclamo por la legalización del aborto en el Municipio de General Pueyrredón (MGP), con epicentro en la ciudad de Mar del Plata.

Entre marzo y agosto de 2018 se registraron 35 actividades en reclamo de la aprobación de la ley IVE, lo que arroja un promedio mensual de 7 actividades, las cuales variaron según sus formatos, lugares de realización, organizaciones convocantes y cantidad de participantes[i].

Durante este período la principal consigna, común a todas las actividades, fue la denominada “triple consigna”, elaborada por la Campaña Nacional: “educación sexual para decidir, anticonceptivos, para no abortar, aborto legal para no morir”. En función de las instancias de tratamiento en el Congreso fueron incorporándose nuevas consignas a las convocatorias: durante marzo la “triple consigna” se combinó con múltiples reclamos en actividades masivas, durante abril y mayo se reclamó “aborto legal ya”, en junio “que sea ley”, en julio y agosto “será ley”. Estas breves consignas se utilizaron además para realizar campañas en las redes sociales los días jueves, marcando la presencia del reclamo “en las calles y en las redes”.

En cuanto al formato de las actividades en MGP fue preponderante el “pañuelazo” (51%), lo que evidencia que el reclamo por la legalización del aborto amplió el “repertorio de protesta” local. El porcentaje restante (49%) se distribuye entre formatos tradicionales de protesta como marchas, paros, realización de festivales, vigilias y junta de firmas. Vale destacar que muchas de las actividades que se realizaron en formatos más tradicionales incluyeron la realización de “pañuelazos”, consolidándolos como rasgo distintivo del repertorio de protesta asociado al reclamo de legalización del aborto.

Actividades en reclamo de la legalización del aborto, según tipo, MGP, marzo-agosto 2018 (%)

*Paros realizados: uno que reclamaba la aprobación de la ley IVE y dos que la ubicaron entre sus principales reclamos. Fuente: elaboración de la autora.

¿En qué consisten  los “pañuelazos”? Se trata de concentraciones de mujeres, trans, travestis y algunos varones de una o dos horas de duración durante las cuales se realizan cantos y se toman fotografías colectivas con los pañuelos abiertos en señal de apoyo al proyecto de ley. Estas actividades se realizaron sobre todo los días martes en el centro de la ciudad de Mar del Plata, como parte de los “martes verdes” propuestos por la Campaña Nacional para ser replicados federalmente. Durante algunos “pañuelazos” se sumaron otras actividades como venta de pañuelos, estampado de pañuelos, pintura de carteles o maquillado alusivo. Con un formato laxo, las participantes fueron fundamentalmente adolescentes y jóvenes, en general asistiendo de manera autoconvocada de manera individual o en pequeños grupos. Se registraron “pañuelazos” en otros puntos específicos de la ciudad.

La mayor parte de las actividades realizadas (61%) superaron les 100 participantes, aunque hubo concentraciones de entre 50 y 100 personas sobre todo en el formato “pañuelazo” (39%). Las actividades que contaron con más de 500 participantes y llegaron a varios miles de personas (12%) adoptaron el formato de marchas por el casco céntrico de la ciudad de Mar del Plata.

Las actividades se convocaron sobre todo desde la mesa de la Campaña-MGP (29%) de manera individual o bien desde el MMD (14%). En tercer lugar se ubican las actividades multisectoriales convocadas por la Campaña Nacional-MGP, el MMD y diversas organizaciones (17%). Otras actividades en apoyo a la ley IVE fueron organizadas por profesionales de la salud y/o sindicatos (11%) universitarias (11%) y centros de estudiantes (6%). Las cifras expresan tanto el protagonismo de la Campaña Nacional-MGP como la pluralidad de sectores que se movilizaron reclamando la sanción del proyecto de ley. 

Actividades en reclamo de la legalización del aborto, según organizaciones convocantes, MGP, marzo-agosto 2018 (%)

Fuente: elaboración de la autora.

La dinámica de crecimiento del reclamo puede medirse en la demanda de pañuelos verdes de la Campaña Nacional que llevan estampada la “triple consigna”. A lo largo de estos meses la filial MGP puso a la venta pañuelos en cada una de las actividades realizadas, los cuales se agotaron sistemáticamente. Se recibían y vendían tandas desde 50 a 100, 200 e inclusive de 500 pañuelos en festivales y marchas. Desde la Campaña Nacional-MGP entre marzo y agosto se vendieron más de 1400 pañuelos oficiales, los cuales son producidos por una cooperativa y representan su principal fuente de financiamiento.

Otras organizaciones también confeccionaron pañuelos que replicaban el verde y la “triple consigna” y distribuyeron o vendieron cientos en cada una de las actividades realizadas a lo largo de estos cinco meses, en una cifra igual o mayor a la de pañuelos oficiales. En las últimas semanas se sumaron vendedores ambulantes con pañuelos producidos por ellos mismos, los cuales también se agotaron. La demanda fue tal que ante la falta de abastecimiento ocasional se implementó en algunos “pañuelazos” y marchas el corte de metros de tela verde aportada por las propias asistentes, distribuyendo pañuelos improvisados que permitían portar el color distintivo del reclamo a decenas de mujeres.

Dada la pluralidad de fuentes de producción es difícil estimar el número total de pañuelos distribuidos y/o producidos, con o sin estampa durante los cinco meses que transcurrieron desde la presentación del proyecto de ley. No obstante, el pañuelo se ha convertido en una especie de emblema portado en cuellos, muñecas, mochilas, carteras y todo lugar que lo permita por parte de mujeres, travestis, trans y cada vez más varones. Una suerte de ejército heterogéneo y multifacético que con su pañuelo como distintivo mantiene constantemente visible en el espacio público la demanda que lo unifica: que sea ley.

[i] Los datos fueron recabados en distintas fuentes: periodísticas (diario La Capital, portal 0223, Qué digital, El marplatense, El retrato de hoy), gacetillas de prensa, volantes, perfiles de redes sociales de la Campaña Nacional-MGP, del MMD y de otras organizaciones. Información que fue complementada con entrevistas semi-estructuradas realizadas por la autora los días 4 y 6 de agosto de 2018 a tres de las principales referentes de la Mesa de la Campaña Nacional-MGP: Roxana LeFayt, Alba Salinas y Valeria Crespo.

El tercer sector en Mar del Plata

Germán Pérez (coord.)

La presente investigación es resultado del trabajo realizado en el marco del acuerdo de colaboración suscripto por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (INDEC) y la Universidad Nacional de Mar del Plata para desarrollar el proyecto “Estudios sociológicos y demográficos de problemáticas locales y regionales” (Ordenanza de Consejo Superior Nº 229 del 4 de julio de 2013).

 Nos propusimos entonces una investigación en el nivel municipal que permitiera aproximarnos a la fisonomía del tercer sector marplatense con un doble propósito: por un lado, contribuir mediante una sistematización de los datos disponibles a la producción de políticas públicas en el área; por el otro, elaborar una serie de análisis de los datos que nos proveyera un diagnóstico crítico sobre las relaciones del gobierno local con los actores no gubernamentales que se desarrollan a distancia del estado y el mercado.

 Entendemos por tercer sector a una esfera de acción social y política que surge a distancia del estado y del mercado con capacidad de elaborar demandas y generar formas de participación y autogestión propias. Nos interesó indagar esa dimensión participativa y local de la ciudadanía que refuerza la democracia y vincula al ciudadano con una experiencia viva y protagónica de la política.

 Los interrogantes básicos que orientaron la investigación fueron: ¿Cómo es el tercer sector en Mar del Plata? ¿Qué tipo de actividades se desarrollan en la “sociedad civil”? ¿Qué organizaciones predominan? ¿Qué relación hay entre el Estado y las organizaciones de la sociedad civil/tercer sector? ¿Qué potencialidades y limitaciones encuentran las agencias públicas del gobierno local para articularse con este tipo de organizaciones?

Tomamos como fuente de análisis al Registro de Entidades de Bien Público (EBP) que elabora la Dirección de Relaciones con las ONG del Municipio de General Pueyrredón. Mediante este registro voluntario, que constituye el reconocimiento de las organizaciones como interlocutores válidos por parte del estado municipal, los funcionarios habían recopilado una abundante cantidad de información relevante. No obstante, nunca había sido sistematizada ni digitalizada debido a problemas técnicos, de infraestructura y capacitación. Dos nuevos objetivos se articularon a partir de ese momento: a) recuperar la gran cantidad de trabajo realizado por un conjunto de actores al completar el cuadernillo de registro en una base de datos consolidada,  y b) proporcionar lecturas sobre los datos que contribuyeran a la toma de decisiones en materia de políticas públicas.

 El trabajo de archivo se realizó en las dependencias municipales durante los meses de agosto y septiembre de 2013. El resultado del trabajo de campo fue que se completó la matriz de datos con información de 258 formularios de registro de EBPs. Esta base de datos fue posteriormente consolidada y procesada mediante SPSS. El procesamiento incluyó además la construcción de tipología de organizaciones según el ámbito al que orientan actividades. Durante el año 2014 se procedió a la elaboración de las variables y categorías que se presentan a continuación.

Informe INDEC- UNMdP

Informalidad y pobreza se conjugan en la recolección informal de residuos sólidos urbanos reciclables.

Prof. MSc. Nélida M. Barabino[1]

 

                Entre las postales habituales que se pueden observar en Mar del Plata, está la de los recolectores informales de residuos domiciliarios reciclables (RSUR), comúnmente denominados “cirujas o cartoneros” que,  con distintos vehículos,  recorren cada día las calles para obtener todos aquellos elementos que les puedan reportar algún ingreso.

                Esta actividad es la expresión  territorial de la conjunción de problemáticas comunes en muchas ciudades medias latinoamericanas, siendo tres las principales: amplias brechas sociales, debilidad en la gestión de los residuos sólidos urbanos y laxitud de las normas ambientales.

                La profunda brecha que separa a los grupos sociales según su posición social y económica tiene expresión territorial, tanto por los barrios que habitan, la estructura de los mismos, las actividades que realizan y la forma en que satisfacen sus necesidades de supervivencia.

                En el caso de los recolectores informales, su realidad transcurre residiendo en los barrios periféricos mal servidos, generalmente de formación reciente en la historia de la ciudad y con marcados índices de necesidades insatisfechas como resultado de las dificultades que poseen para insertarse formalmente en los circuitos laborales debido a los precarios niveles de instrucción y capacitación para el trabajo que han alcanzado.  También deben considerarse situaciones macro estructurales por las que atraviesan los países pobres que desestructuran el mercado laboral y las posibilidades de promoción para vastos sectores de su población.  A su vez, las ciudades de los países pobres, habitualmente, presentan déficit con relación a la gestión urbana y normas relajadas respecto de algunos temas que no califican como  prioritarios en ese contexto.

                El caso de la gestión de los residuos sólidos domiciliarios (RSU) y particularmente de aquellos que son potencialmente reciclables es uno de esos complejos que en muchas ciudades, entre las que se incluye Mar del Plata, aún no ha podido gestionarse de manera tal de alcanzar los mejores resultados ambientales, sociales y  económicos. Pero paradójicamente esa falencia es la que permite que diariamente un grupo numeroso de conciudadanos obtenga de la “basura” depositada en las veredas su magro sustento de supervivencia, de manera lícita.

                La modalidad con la  que cada “cartonero” lleva adelante su tarea tiene relación con un número muy importante de factores entre los que se pueden mencionar las distancias que recorre desde su lugar de vida hasta el lugar de recolección, los miembros del hogar que participan, el tipo de materiales que recolecta, la capacidad de almacenamiento con que cuenta en su domicilio y las exigencias del acopiador a quien le vende, la experiencia en la actividad y la dedicación a la misma.

                Es por todo esto que estudiar en profundidad esta actividad permitió realizar una clasificación según el tipo de vehículos que utilizan ya que el mismo es un indicador de utilidad  para analizar todo el conjunto. Por ejemplo, aquellos recolectores que utilizan vehículos automotores –generalmente no habilitados para la circulación por sus condiciones de seguridad y dominios legales- realizan las recorridas entre varios miembros del hogar, transitando largas distancias y preferentemente en horario vespertino o nocturno. Recolectan básicamente cartones y sólo ocasionalmente objetos de gran tamaño. En las mismas recorridas obtienen productos alimentarios por el sistema de “mangueo” a los comercios, tarea en la que suelen tener activa participación los menores. Por su parte quienes utilizan carros con tracción a sangre, si bien también recorren grandes distancias, recolectan objetos más grandes, botellas de vidrio y metales, aunque ningún recolector, de ninguna modalidad de acarreo desecha el cartón. Otro grupo desarrolla organizaciones estratégicas algún día específico de la semana, por ejemplo “las timbreras” –quienes piden ropa o comestibles casa por casa como complemento a la práctica del cartoneo-  suelen realizar su tarea los días sábados por la mañana y en conjunto entre varios miembros de la familia/hogar, incluidos los menores.  Esta clasificación se completa con cartoneros que acarrean carros artesanales en motos o bicicletas o simplemente llevándolos de tiro caminando y esporádicamente encontramos algún recolector arrastrando su bolsa, un changuito de supermercado o una bicicleta con canasto.

                Es muy importante resaltar que toda vez que se está tratando de los RSUPR, lisa y llanamente se está tratando de DINERO, de mucho dinero. Contradictoriamente ese caudal económico por lo general no es gestionado, ni organizado, ni apropiado por los municipios, pobres y necesitados, sino por grandes empresarios recuperadores y por las industrias recicladoras de capitales nacionales o internacionales, localizadas en las grandes ciudades, muchas veces extraterritorializaciones de empresas multinacionales que obtienen materias primas a costo ínfimo en el que está incluido el de la mano de obra necesaria para recolectarla.

                El cierre de esta nota remite al título, en el que se indicó que la actividad de recolección informal de residuos sólidos urbanos potencialmente reciclables expresa la conjunción entre pobreza e informalidad. Los aproximadamente 1500/1800 recolectores informales existentes en Mar del Plata, pertenecen todos al segmento más precario de la sociedad, que realizan una actividad absolutamente informal por la que obtienen solamente un ingreso relacionado con el precio de los materiales, en negro,  y no por la mano de obra implicada en la actividad. Este primer eslabón, imprescindible, del circuito económico de la industria del reciclado se encuentra expresamente excluido en la resolución fiscal específica para el sector.

                La situación descripta es, en parte, la razón por la cual este recurso económico no es captado por los municipios en provecho de sus arcas siempre insuficientes para el desarrollo de sus territorios y población.

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Fardos de botellas de PET, en un acopiador mediano de sur de la ciudad
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Carro cartonero circulando por el Barrio Los Pinares

[1] Profesora en Geografía y Magister en Gestión Ambiental del Desarrollo Urbano. Docente-Investigadora de la Facultad de Humanidades de la Universidad Nacional de Mar del Plata. Esta publicación está basada en los resultados de la tesis de maestría  «La importancia de la recolección informal de residuos urbanos reciclables. análisis de los aspectos sociales, ambientales y económicos

Brechas en la calidad de vida de la población: Desigualdades territoriales en Mar del Plata y el partido de Gral. Pueyrredón

Grupo de Estudios sobre Población y Territorio (Centro de Investigaciones Geográficas y Socioambientales – Fac. Humanidades – UNMdP)

Patricia Lucero; Claudia Mikkelsen; Fernando Sabuda; Sofía Ares; Marisa Sagua; Marcela López; Silvina Aveni; Matías Gordziejczuk;  Mariana Bruno; Graciela Berti –

 

¿Cuáles son las diferencias en las condiciones de vida de los pobladores del partido de General Pueyrredón? ¿Cómo se evidencian las desigualdades sociales entre los barrios del área urbana, las localidades menores y el espacio rural de hábitat disperso? ¿Cuántos habitantes se ven afectados según su distribución en el territorio? Estas son las preguntas que orientaron el análisis realizado respecto de la evaluación de la calidad de vida de quienes habitamos la ciudad de Mar del Plata y el partido de General Pueyrredón. Entendemos que la configuración espacial actual de la calidad de vida de la población local es el resultado de la aplicación de políticas públicas y privadas en el marco de cada patrón de acumulación instaurado en Argentina, pero también de las deficiencias y/o ausencias de tales políticas. De allí que las respuestas ofrecidas pueden ser centrales para contribuir con los tomadores de decisiones a nivel local:

El concepto calidad de vida no tiene una definición unívoca, ni alcance universal, sino que se construye y reconstruye en función de las particularidades culturales e históricas de los lugares. Aquí la concebimos como “una medida de logro respecto de un nivel establecido como óptimo, teniendo en cuenta dimensiones socioeconómicas y ambientales dependientes de la escala de valores prevaleciente en la sociedad y que varían en función de las expectativas de progreso histórico”, según la definió Guillermo Velázquez en 2001.

En base al Censo Nacional de Población, Hogares y Vivienda (CNPHyV) de 2010 calculamos un índice de calidad de vida (ICdV), medida resumen que permite evaluar objetivamente los diversos grados de bienestar existentes en el distrito, sintetizando la situación en base a indicadores sobre educación, saneamiento, vivienda y actividad económica.

En esa fecha, el partido de General Pueyrredón reunía un total de 618.989 habitantes, de los cuales 583.759 habitaban en la ciudad cabecera Mar del Plata. La alta concentración de población residente en la actualidad  significa un desafío importante para las políticas integrales en la perspectiva del desarrollo local y de la sustentabilidad urbana.

Para la ciudad de Mar del Plata (Mapa 1), la configuración territorial exhibe la prevalencia de un núcleo central consolidado con niveles medios de calidad de vida, una zona lindante extendida hacia el norte y el sur con guarismos más elevados, y condiciones bajas y deficitarias especialmente hacia el interior y las zonas de borde del ejido urbano oeste y sur. Sobre los ejes de circulación principales se distribuyen los niveles medios de calidad de vida en sentido radial, siguiendo el recorrido de las avenidas y su continuación en las rutas 11, 2, 226 y 88 que conectan a la ciudad con el interior del partido.

Mapa 1. Índice de calidad de vida (ICdV). Mar del Plata, 2010

Indice de calidad de vida Mar del Plata

Fuente: elaboración personal sobre la base de datos del CNPHyV 2010.

 El área periférica de Mar del Plata se asocia con menores registros en las condiciones de calidad de vida. Allí se observan mayores carencias en cuanto a vivienda, educación, actividad económica y saneamiento. Estas áreas son de poblamiento más reciente, y en muchos casos registran privaciones ligadas a la construcción de las viviendas e irregularidades en su régimen de tenencia, situación que repercute negativamente en la adecuada cobertura de ciertos servicios básicos. Se suman limitaciones en el acceso a la instrucción formal y al empleo registrado.

En lo concerniente al espacio rural y las localidades menores del distrito (Mapa 2), se identifican situaciones contrastantes, representativas de los cuatro grupos de calidad de vida que se han delimitado. Hacia el norte, en torno a la autovía 2, Estación Camet muestra niveles medios y bajos, mientras que en el ámbito de población rural dispersa la calidad de vida es baja. Hacia el noroeste, el entorno de la ruta 226 exhibe un mosaico de situaciones, por ejemplo, prevalecen condiciones contrapuestas entre el barrio residencial Sierra de los Padres (nivel alto y medio) y su entorno próximo (nivel bajo y muy bajo).

Mapa 2. Índice de calidad de vida (ICdV). Partido de General Pueyrredón, 2010

Indice de calidad de vida General Pueyrredón

Fuente: elaboración personal sobre la base de datos del CNPHyV 2010.

 El corredor de la ruta 88, testimonia valores de calidad de vida bajos a muy bajos, con las situaciones más deficientes en torno a la ciudad de Batán. Finalmente, el área delimitada por las rutas 88 y 11 Sur tiene niveles de calidad de vida entre bajos y medios. Las peores situaciones se advierten en Chapadmalal y en un sector de El Marquesado lindante con el partido de General Alvarado. En sendos casos, además del nivel educativo de los pobladores, es muy notoria la incidencia negativa de las condiciones sanitarias y de la vivienda.

Por tanto, los valores estimados exhiben una distancia notable entre el ICdV alto y muy bajo, y la configuración espacial confirma la estructura en patrones de distribución bien diferenciados. Los resultados dejan ver la cantidad de habitantes que se encuentran afectados por estas desigualdades territoriales, permitiendo afirmar que más de la cuarta parte de la población del partido (151.494 personas) habita en espacios con deficiencias y riesgos materiales e inmateriales que reducen marcadamente sus niveles de bienestar.

En este sentido, consideramos fundamental realizar contribuciones vinculadas al diagnóstico y análisis de problemáticas de nuestra ciudad que colaboren en el diseño de medidas gubernamentales conducentes a mejorar la calidad de vida de todos sus habitantes.

Mar del Plata, septiembre de 2016

Contacto: grupogespyt@gmail.com; http://www.gespyt.blogspot.com