Silvana Ferreyra y Mariana Pozzoni
Según el ¨Instructivo para autoridades de mesa¨ que elaboró la Provincia de Buenos Aires para las PASO 2017, las boletas son enviadas por el Correo Argentino en cajas (bolsas) para cada mesa electoral. El presidente de mesa, una vez ubicadas las mismas en el cuarto oscuro, es el encargado de controlar que las boletas coincidan con los modelos oficializados y asegurarse que no tengan alteración en la nómina de candidatos.
Pero ¿qué pasa cuando esta situación ideal no ocurre? El análisis de los últimos comicios en el distrito de General Pueyrredón nos invita a pensar que la ausencia de boletas es la regla antes que la excepción.
Por un lado, se encuentran las denuncias más conocidas, emitidas por los precandidatos de algunas fuerzas políticas en los portales de noticias. En esta línea, podemos mencionar la denuncia de Marcos Gutiérrez, quien señaló frente al marplatense.com inconvenientes al inicio de las jornadas, alertando sobre la existencia en algunos bolsos de boletas de Unidad Ciudadana que eran de otro distrito. Estas situaciones fueron detectadas y subsanadas gracias a la extendida presencia de fiscales de este frente electoral, que contaba con cobertura en prácticamente todas las mesas. También denunciaron la falta de boletas desde Mar del Plata, Puerto y Región y dejaron en claro que “nosotros llevamos todas las boletas la semana pasada al Correo Argentino y, según nos notificaron, ellos las entregaron en bolsas, pero resulta que ahora hacen falta.” (cazadordenoticias.com.ar). Esta fuerza local logró cubrir las faltantes, aunque con mayor dificultad y lentitud, ya que no contaba con fiscales en cada mesa. Denuncias más generales fueron llevadas adelante por Cumplir y Unidad Ciudadana, que probaron faltantes “parciales” en una serie de localidades entre las que figuraba Mar del Plata. Estas situaciones deben diferenciarse de los faltantes de boletas que se dan a lo largo del día, ya sea por robos o escasez de boletas que no llegan a reemplazarse. Estas situaciones fueron señaladas por Juan Rey de Nueva Acción y por Marcos Pascuán de Izquierda al Frente, dos listas que se encontraban en internas o disputa directa con otras fuerzas políticas.
Por otro lado, una mirada impresionista realizada desde este Observatorio, nos mostró la existencia de casos donde los faltantes nunca fueron cubiertos durante la elección y, posiblemente, siquiera advertidos a raíz de la inexistencia de un desarrollo territorial de estas alternativas. Esto se debe en parte a que son muy pocas las fuerzas que logran tener presencia de fiscales en todas las mesas, mientras que otras tienen un solo control por escuela o por un conjunto de establecimientos o, incluso, en varios casos, no registran ningún representante. De manera aleatoria hemos detectado la ausencia reiterada de boletas de al menos 10 listas que presentaban precandidatos en los distintos niveles. Se trata de algunas líneas internas del Frente Unión Federal, de Del Campo Popular, del Frente Patriota Bandera Vecinal y del Partido Federal; y de las listas únicas del Movimiento de Organización Democrática y del Encuentro Popular por Tierra Techo y Trabajo. Todas ellas obtuvieron votos en el conteo general del distrito de General Pueyrredón, razón por la cual podemos inferir que los faltantes no alcanzaron a todas las mesas.
De acuerdo con el ya referido ¨Instructivo para las autoridades de mesa¨, la falta de boletas no es motivo suficiente para impedir la apertura del acto electoral. Así las cosas, pareciera que los actores aprenden a convivir con estas situaciones reales que contrastan con las imágenes ideales que hemos construido sobre el acto electoral.
Lejos de contribuir con otro grano de arena a la deslegitimación de las PASO, esta nota busca aportar visiones que desmitifiquen el proceso electoral. Algunas veces podemos creer que detrás de las irregularidades se encuentra la mano de algún complot partidario o corporativo. Sin embargo, es probable que en otras ocasiones, se trate simplemente de las dificultades para cubrir todas las grietas de un sistema gigante y complejo. Entre la estrategia y la desidia, el complot y el error quizás pueda encontrarse la llave que pone en marcha el sistema. Las soluciones más generales para subsanar este problema pueden venir de la mano de una profunda discusión en torno al sistema de votación, que contemple las ventajas y desventajas de la lista sábana y la boleta única. No obstante, existen pasos intermedios para remediar estos inconvenientes, tales como la mejora en la capacitación de las autoridades de mesa. En este sentido, es preciso que ésta no se limite a la lectura de un instructivo estrictamente informativo, sino apuntar a la compresión del sistema en su totalidad, integrando prácticas concretas con lecturas críticas.